
Escribo estas palabras alentado por el recuerdo de la cariñosa participación de José Pedro Pérez-Llorca en los distintos actos organizados por la Fundación en reconocimiento a la Constitución española, en los que siempre tuvo bonitas palabras de elogio a Gregorio Peces-Barba, su amigo. Nunca podremos corresponderle de la misma forma, ni detallar suficientemente sus logros políticos en aras del interés público, ni esbozar su personalidad ni carácter. Esa hermosa tarea les corresponde a sus más próximos.
La triste noticia de la pérdida nos encomienda más bien a otro tipo de tarea, la de transmitir el ejemplo de su vida, dedicada al Derecho, a la justicia y a la superación de las dos Españas. Le recuerdo ahora alertando a la juventud del Colegio Isabel de España en Madrid, sobre los males de nuestra nación: «la Chapuza y el Camelo», aquellos dos personajes arquetipo responsables de todo lo que nos ha ido mal. Su obra vital, construida con trabajo y lealtad, es un escudo frente a los garrotazos goyescos que nos propinan aquellos, mal que les pese a quienes sólo comprenden la realidad desde el blanco o desde el negro, que obvian los matices y el humor.
El ejemplo que nos deja es idóneo para transmitirlo a los nuevos españoles. Ojalá quieran escuchar la historia narrada de un hombre de la patria. Ojalá puedan hacerlo en sus centros educativos. Su ejemplo como político comprometido, que demostró sobradamente con su talante conciliador; como profesional responsable, que prueba diariamente la excelencia prestada por los servicios probono de su despacho de abogados; y como servidor de la cultura, en tanto que Presidente del Museo del Prado, es un claro exponente del ciudadano global, personaje de nuevo siglo y cuño a cuyo arquetipo debemos aspirar.
Observaremos cómo se habla de los padres de la Constitución, de su obra, de los derechos y de las libertades, de la diversidad, del respeto, del diálogo y del ciudadano global. Muchas gracias por todo tu trabajo y por la tarea que nos dejas.
Alberto Iglesias, Director de la Fundación Gregorio Peces-Barba.
Don José Pedro fue presidente de honor de la cátedra Mario Villarroel para el Derecho International Humanitario y los Derechos Humanos de la Fundación Gregorio Peces-Barba.